The Local Dispatch #4

The Local Dispatch de esta semana trata sobre el incendio de PDVSA en Cabimas, el desplazamiento indígena y graves preocupaciones en la industria alimentaria nacional

The Local Dispatch presenta historias seleccionadas de periodistas y medios locales que informan sobre las noticias desde el interior de Venezuela. Este tipo de historias no tienen visibilidad en el exterior, incluso cuando presentan la imagen más precisa de lo que realmente está sucediendo en el país. The Dispatch se publica semanalmente.

Explosión en Cabimas: cronología de otro incidente que enfrenta PDVSA en Zulia

En la madrugada del martes, un tanque que almacenaba 75 mil barriles de crudo explotó tras el impacto de un rayo en el terminal La Salina, operado por PDVSA en Cabimas. A las 7:20 am, el comandante de Bomberos de Cabimas informó que la situación estaba bajo control y que no era necesario evacuar a los habitantes. Sin embargo, a las 10:50 am, Versión Final reportó que los bomberos no contaban con suficiente agua ni espuma para apagar el incendio. Cerca del mediodía, se produjo una segunda explosión, dejando a 26 personas con quemaduras de primer y segundo grado, según informó Radio Fe y Alegría. En la noche, el Colegio Nacional de Periodistas solicitó agua, Gatorade y comida para los bomberos que combatían el incendio, el cual se extinguió más de 24 horas después, alrededor de las 8 am del miércoles, de acuerdo con El Regional del Zulia. PDVSA atribuyó el incidente a “condiciones atmosféricas extremas” y afirmó que “no hubo afectaciones a terceros”, a pesar de los 26 heridos.

Marianna Párraga, periodista de Reuters especializada en petróleo, señaló que incidentes frecuentes como este “suelen interrumpir operaciones y la infraestructura difícilmente se recupera del todo”. La explosión conmocionó a los habitantes de Cabimas, quienes pasaron el día observando cómo el humo negro se expandía por el municipio.

Este es el segundo incidente grave en la región del Lago de Maracaibo en menos de un mes. El 26 de septiembre, una barcaza contratada por PDVSA para labores de mantenimiento en los pozos se hundió, causando la muerte de seis trabajadores, según el testimonio de un sobreviviente recogido por el diario La Verdad.

Desplazamiento forzoso, precariedad y represión en el ‘Día de la Resistencia Indígena’

¿Qué hacer cuando tus territorios ancestrales están ocupados por grupos armados y el Estado te oprime desde los lugares más remotos del país? Para varios grupos indígenas, la única opción parece ser migrar a las ciudades. Algunos indígenas Jiwi y Pume que buscan refugio en San Fernando de Apure contaron a Radio Fe y Alegría mientras cocinaban en las gradas de una cancha abandonada. “Soy una persona que busca un ambiente donde nosotros, o por lo menos yo, con el tiempo tengamos un buen terreno”, explicó Antonio Paz, uno de los desplazados. “No puedo habitar, así como estoy aquí, porque esto no es un lote para construir un ranchito como debe ser.”

Mientras tanto, las autoridades en Barranquilla han anunciado que planean deportar a 219 indígenas Yukpa provenientes de Perijá, quienes se han concentrado en la ciudad buscando mejores oportunidades. “Acuden a la mendicidad infantil, a la limosna, a limpiar vidrios. Eso no está bien en nuestra ciudad, que va progresando permanentemente”, dijo el jefe de Gestión Social de la alcaldía a la Emisora Atlántico.

Olnar Ortiz, indígena Baré y coordinador de Foro Penal para los pueblos indígenas, declaró que el 12 de octubre “no es un día para celebrar”. Según reportó El Diario, la reciente represión post-electoral afectó también a seis indígenas de Amazonas, detenidos durante protestas y trasladados al penal de Tocorón el 4 de septiembre.

Productores de alimentos advierten sobre deserción masiva de agricultores

Más de 2.600 productores de maíz han abandonado el cultivo en los últimos cuatro años, según dijo Celso Fantinel a El Siglo, presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro). La misma situación se presenta en los cultivos de arroz y café, donde los agricultores están obligados a vender sus productos en bolívares. Esto, sumado a la inflación y la brecha cambiaria, hace imposible recuperar lo invertido en la cosecha.

Tal Cual reportó que el precio mínimo oficial para la tonelada de maíz es de $360-380, pero los industriales pagan actualmente entre $315 y $320 en bolívares al cambio oficial. “De no llegar a acuerdos con la agroindustria en estos tres rubros, quedará en veremos cómo podemos hacer las futuras siembras”, advirtió Fantinel.

Osman Quero, vicepresidente de Fedeagro y presidente de Fedecámaras Portuguesa, expresó la misma preocupación, destacando que recibir pagos en bolívares por una inversión hecha en dólares genera gran incertidumbre y ansiedad. “El diferencial cambiario entre la tasa del BCV y el paralelo puede definir la rentabilidad del negocio”, afirmó Quero en septiembre a través de X. Señaló también que, aunque los productores han realizado inversiones importantes en dólares para mejorar las siembras, la cosecha nacional sigue pagándose en bolívares, mientras los importadores y el sector agrocomercial reciben pagos en divisas por adelantado.

Lecturas sugeridas:

  • Runrunes: Los presos políticos en Tocorón enfrentan presiones inhumanas para que confiesen delitos que no cometieron. Las visitas de sus familiares se ven marcadas por condiciones que solo aumentan su sufrimiento.
  • El Carabobeño: Un solo día de fluctuaciones eléctricas afectó gravemente a 10 estados del país, incluida Caracas.
  • Correo del Caroní: En Guayana, dirigentes sindicales chavistas llevan a cabo asambleas encubiertas para asegurar su control sobre los Consejos Productivos de Trabajadores.
  • Crónica Uno: En la Punta de Araya, los vecinos de El Yaque impulsan un proyecto de recolección de desechos e iluminación del área.