Adrian González, 16 años y encerrado en un cuarto oscuro

El adolescente estaba con amigos en Parque Central la noche del lunes 29 de julio. Fue detenido por la Guardia Nacional Bolivariana. Su madre asegura que no participaba de la protesta y que no se le permitió visitarlo durante ocho días

Nombre: Adrián Keiler González Torrealba
Año de nacimiento: 2008
Fecha de detención:  29 de julio de 2024
Zona: Caracas, Venezuela
Ocupación: estudiante de tercer año de bachillerato

La noche del lunes 29 de julio, un día después de las elecciones presidenciales, Leticia Torrealba recibió una llamada de un conocido de la familia, quien le informó que su hijo, Adrián González, había sido detenido por la Guardia Nacional Bolivariana mientras caminaba con varios amigos cerca de una protesta en Parque Central. Inmediatamente salió al módulo de policía de Maripérez a buscar información sobre el paradero de su hijo.

De ahí la enviaron al retén de la PNB de Zona 7, en Boleíta, donde otras madres de detenidos se aglomeraban preguntando por sus familiares. “Estábamos angustiadas porque decían que los menores de edad estaban encerrados con los adultos. Fue una locura total, estábamos consternadas por la situación”, contó Leticia entre lágrimas durante un encuentro de familiares de detenidos organizado por Provea y Foro Penal el pasado jueves 15 de agosto.

Al día siguiente, el martes 30 de julio, el joven fue trasladado al centro policial de Cochecito, donde le permitieron a su madre entregarle ropa y artículos de aseo, pero no le dejaron verlo.

A Adrián le imputaron cargos de terrorismo, incitación al odio y desestabilización política. Sobre la gravedad de los cargos que pesan sobre su hijo, Leticia explica que “es una cosa absurda, ¿cómo pueden unos niños saber de terrorismo? Ellos no tienen ni idea de eso. Me siento impotente al no poder hacer nada, y que estén acusando a unos niños inocentes de algo que no cometieron”, dijo la madre a la prensa. “Uno se encuentra con las manos atadas, porque no puede hacer nada y ellos no aceptan defensores privados”.

Leticia, la madre de Adrián, enseña la cédula de su hijo en la carpeta de su caso.

Foro Penal contabiliza 129 adolescentes (12 a 18 años) entre los 1.503 detenidos en la ola de arrestos tras las elecciones presidenciales del 28 de julio. Sólo 90 personas han sido excarceladas.

Finalmente, ocho días después de que Adrián fue detenido, le permitieron a Leticia entrar a verlo. “Le pregunté, como madre, si lo habían atrapado con una piedra en la mano, y me dijo que no”. Adrián le contó las condiciones en la que estaba encerrado:  “Mamá, aquí no hay ventilación de nada. No dejan hablar con nadie, ni tener teléfonos ni nada. Quiero salir de aquí, estoy desesperado”. 

En esa primera visita, Adrian le dijo a su mamá que estuviera tranquila, que él iba a estar bien. Pero su madre sólo sentía preocupación. “Lo único que me importa es estar con él, abrazarlo y sentirlo. Como mamá es horrible, siento un nudo en el pecho, me siento desesperada. Él es un niño inocente que no sabe nada de política”.

La madre del liceísta contó a los periodistas que a su hijo lo estaban tratando bien y no había sido golpeado ni maltratado, pero que no había recibido información sobre si iba a tener permiso de visitarlo. Los funcionarios le dijeron que la iban a llamar o enviar un mensaje para saber cuándo podía ir a ver a su hijo. Se enteró por familiares de otros detenidos que se había perdido un día de visita, y que Adrián se había puesto muy triste porque ella no fue a verlo.

Leticia espera reunir a Adrián en casa con sus otros tres hijos. ”Lo único que pido es que esta situación termine. Quiero libertad, que mi hijo esté tranquilo afuera. Eso es lo único que pido”.